Vuelta por el Reino de los Mallos
Distancia |
45
km. |
Ciclable |
100
% |
|
|
|
Desnivel |
1.212
mts. |
Dureza |
|
Duración |
4
-6 h. |
Medio Recorrido |
Pista
- 38,5 Km. |
Sendero
- 1,5 Km. |
Carretera
- 5 Km. |
Ruta circular en forma de ocho, con perfil dentado, que parte de Ayerbe y recorre las estribaciones occidentales de la sierra de Loarre en lo que en su día perteneció al mítico Reino de los Mallos. Aprovechamos para ello las nuevas pistas creadas para la recuperación medioambiental de zonas, antes boscosas y destruidas por el feroz incendio del verano del 2001, unido a rutas más tradicionales como el de Escalete o la pista que desde Sarsamarcuello asciende a la sierra. Para completar el recorrido realizaremos un tramo de senda que, desde el collado de Santo Román, desciende hasta el pueblo de Riglos. El recorrido es aéreo, ascendiendo a su punto más alto en el Cerro Santo Román (no confundir con el collado del mismo nombre), rodea los mallos de Riglos por su cara norte y desciende hasta la Foz de Escalete para volver a ascender hasta el collado de Santo Román desde donde descendemos hasta Riglos y volvemos a Ayerbe por viejos caminos de herradura.
La marcha, a mi entender, debe hacerse en la dirección que se describe ya que el descenso desde cerro Santo Román a Escalete tiene un desnivel muy importante y debido a la calidad del terreno sería un suplicio ascender por él. La parte más técnica del recorrido es el descenso por sendero desde el collado hasta Riglos. Aunque es ciclable en algunos tramos, gran parte de él la deberemos hacer a pie, aunque esto depende de la pericia de cada uno.
El recorrido está más indicado en primavera, verano y otoño, siempre y cuando no haya llovido ya que el terreno puede tornarse impracticable. Además no debemos perdernos la visita de la ermita de San Miguel y acercarnos hasta el castillo de Marcuello y la ermita del mismo nombre desde se domina un paisaje excepcional.
Hasta Ayerbe nos acercamos por la carretera A- 132. Camping, alojamientos y servicios en el pueblo. La ruta dispone de cuaderno de rutas y track para GPS.
Descripción
Partimos de Ayerbe poniendo a cero el cuentakilómetros en el inicio de la carreterita que nos lleva a Loarre, la A-1206. Salimos por asfalto por un terreno suave de forma que nos propiciará calentar los músculos. Cruzamos la vía del tren por un puente y en el km.1,65 aproximadamente, giraremos a la izquierda en descenso para atravesar inmediatamente el río Seco dejando a nuestra izquierda una casa. El camino continúa en dirección norte entre campos de cereal con la sierra frente a nosotros y donde podemos ver casi la totalidad del recorrido que vamos a realizar y nuestro siguiente objetivo, Sarsamarcuello. Llegamos a la carretera local – km.4,82 - a Linas de Marcuello que atravesamos de frente para ascender por la carretera de acceso a Sarsamarcuello, pueblo al que llegamos en el km. 5,69.
Entramos por el barrio bajo que se articula junto al camino de entrada, con las casas agrupadas en torno a la iglesia parroquial de San Nicolás de Bari. Atravesamos la población situada en la ladera de la sierra siguiendo los carteles que nos indican el Mirador de los Buitres hasta entrar en una pista que asciende suavemente entre recurvas para ganar altura. Nos acompañan ahora también marcas de GR-95 (Zaragoza – Alto Pirineo). En el km. 6,63 dejamos un camino a la izquierda que nos llevaría a Linás de Marcuello con marcas de GR-1.
Seguimos ascendiendo y a partir de este momento podemos ver durante bastantes tramos como unos restos de camino deteriorado nos acompañan por la izquierda de forma paralela a la pista que seguimos. Bien pudieran ser los restos de la antigua vía romana que iba desde Caesaraugusta hasta Beneharnum al otro lado de los pirineos (La red viaria romana en Aragón - Mº. A. Magallón Botaya) y con la que confluimos hasta confundirse poco antes del km. 9,02 donde dejamos a la derecha un camino que tras introducirse en el bosque acaba en el castillo de Loarre unos kilómetros más adelante. Seguimos por la pista y frente a nosotros tenemos cercanos los restos del castillo de Marcuello al que llegamos en el km 10,26. Junto al camino las ruinas de la ermita de San Miguel (s. XII). Bien merece la pena desviarse unos metros y llegar hasta los restos del castillo de Marcuello del siglo XI y la ermita de la Virgen de Marcuello (s. XVII) y ver el soberbio paisaje sobre el llano y el Río Gállego.
Continuamos el recorrido hasta dejar a la izquierda el desvío al Mirador de los Buitres y seguimos durante un tramo que desciende hasta llegar al collado de Santo Román punto del que parten varias pistas y el sendero que desciende a Riglos (GR-1). Este es el lugar donde se cruzará el bucle de la ruta y al que volveremos más tarde. Tomamos la pista que sale a la izquierda en subida. Es de nueva creación tras el incendio de 2001 y asciende hasta los puntos más altos que se encuentran en la parte “trasera” de los Mallos de Riglos. La subida es bastante dura pero de momento el firme aún es bueno.
Primero pedaleamos por la vertiente sur de la sierra para, tras una fuertísima subida con peor piso cruzar un pequeño collado y pasar a circular ya por la cara norte. Poco a poco la intensidad del ascenso disminuye -o así lo sienten nuestras piernas quizás ya acostumbradas al esfuerzo- y llegamos a un collado –mirador de Santo Román- al pie del cerro del mismo nombre (km.15,23). Desde este punto la vista en un día claro es impresionante en todas direcciones, al sur los mallos de Agüero y valle del Gállego y al norte y este Escalete, sierra de Loarre y Pirineo.
Comienza ahora el descenso por un terreno algo complicado. El piso que poco a poco ha ido cambiando de pedregoso a arcilloso se inclina bastante y comienzan a aparecer los regueros. Esta zona está mucho más castigada por las inclemencias del tiempo y es cara norte. Entramos en una zona más húmeda que se reblandece con más facilidad llamada el Lecinar y entre restos de encinas (de ahí su nombre) que quedaron sin quemar llegamos a una parte serpenteante del recorrido que se presenta algo más técnica. Entramos en la zona de las Colladas –km. 16,96- y como su nombre indica pasamos entre pequeños collados hasta abocar finalmente a la pista de acceso –km. 19,13- a la antena que se sitúa en el Puntal de Triste. Tomamos dirección descendente y la inclinación de la pista así como su buen estado puede incitarnos a correr demasiado asumiendo más riesgos de la cuenta y llevarnos algún susto en un par de fuertes curvas. En el km. 20,84 y tras dejar a la izquierda la arruinada pardina de Escaletes, llegamos a la pista que por la Foz de Escalete asciende desde la estación de La Peña.
La pista, que tomamos a la derecha, está en buenas condiciones y salvo en algún pequeño descenso intermedio no se deja de ascender de forma continuada. En épocas de lluvia puede empeorarse bastante. Seguimos por la vertiente izquierda del barranco y tras varias recurvas llegamos a una fuente en el km. 24,08. Dejaremos a la derecha algunas trochas ascendentes abiertas para la recuperación de la zona quemada. Poco más adelante y tras cruzar un barranco muy pedregoso, en el km. 24,33, llegamos a la también arruinada pardina de Pequera un punto importante del recorrido ya que permite elegir varias opciones de rutas. Esta vez tomaremos el camino de la derecha que asciende por una zona de terreno muy suelto y que puede obligarnos a desmontar. Este tramo acaba en unos 500 mts. y la pista se torna suave y agradable. Por desgracia circulamos entre esqueletos de árboles -ahora ya retirados y replantados- de lo que hasta hace unos años fue un precioso y sombrío bosque. Así y con un espectacular paisaje, miremos donde miremos… llegamos de nuevo al collado de Santo Román (km. 27,51). A nuestra derecha queda Riglos, las estribaciones de sus mallos y un espectacular barranco que desciende hacia él y por el nos vamos a adentrar. En frente vemos los mallos de Agüero y el pueblo de Murillo de Gállego.
Medio perdido encontramos un camino frente a nosotros con marcas de GR-1. Lo tomamos en descenso y poco a poco se va degradando hasta convertirse en un sendero, primero ciclable dependiendo de nuestra habilidad y más tarde, debido a lo cerrado de la vegetación y a la cantidad de conglomerados y cantos rodados, solo indicado para ir a pie. Nos vamos adentrando por la margen derecha del barranco de la Mota para pasar bajo los Fils, las impresionantes moles de conglomerados moldeados por las fuerzas de la naturaleza que nos hacen sentir insignificantes mientras gran cantidad de buitres, que anidan en estas paredes, vuelan sobre nosotros. Esta zona es de uso restringido para la escalada en épocas de cría y numerosos carteles nos avisan de la necesidad de no hacer ruidos innecesarios.
En el km. 29,2 tras cruzar un pequeño barranquito el sendero se transforma en camino por el que descendemos cómodamente bajo los mallos hasta los depósitos del agua. Seguimos de frente por donde indican las señales de GR-1, en descenso, por un viejo camino entre muros de piedra y en el que veremos algunas tapas de alcantarilla para la conducción del agua. Entramos en el pueblo de Las Peñas de Riglos por la plaza donde giramos a la izquierda en fuerte descenso hasta la carretera de acceso al pueblo.
Una vez disfrutado del pueblo y sus vistas seguimos en descenso por la carretera de acceso al pueblo. Merece la pena parar en un mirador junto a la carretera para contemplar el majestuoso porte de los Mallos de Riglos en los que no es difícil observar y oír las voces de algún escalador que asciende por una de sus numerosas vías. Seguimos hasta el km. 34,41 donde tomaremos una pista que sale a la izquierda en ascenso. Poco a poco nos introducimos en los restos de un bosque quemado en agosto del 2001 y en el que, afortunadamente, se adivina el rebrotar de nuevos árboles de forma bastante generosa y que ya empiezan a alcanzar buena altura. La pista va ascendiendo suavemente y sin complicaciones hasta que tras un par de revueltas llegamos a un caseta en ruinas (km. 35,6). Desde este punto el camino se suaviza más y vamos atravesando pequeños barrancos en continuo sube y baja hasta llegar tras una breve subida a Linás de Marcuello (km. 38,02).
Tras visitar el pueblo salimos por su carreterita de acceso y en menos de 100 metros giramos a la derecha para tomar un camino, que sin demasiado desnivel, desciende dejando a la derecha la zona de Las Colladas -este nombre parece que se repite en esta excursión- y en dirección suroeste. El camino es muy pedregoso, acompañado muchas veces de murete de piedra deteriorado y veremos de vez en cuando marcas amarillas indicadoras del Camino de Santiago. Entramos en una zona muy difícil ortográficamente hablando y que tiene un gran número de desvíos en el que la mayoría de las veces son entradas a campos de cultivo pero que en alguna que otra ocasión nos pueden despistar sobre todo por la dirección del recorrido que en algún punto varía bruscamente. Unas señales con cintas de obras en el camino quizás indiquen su pronta reparación por lo que esta apreciación puede variar. La vista a nuestra derecha sobre los Mallos de Agüero y Riglos con la entalladura del río Gállego es impresionante y digna de más de una foto.
Así y tras un fuerte requiebro del camino para atravesar el barranco de Siscoya, este toma dirección sureste cruzamos las vías del tren por un paso bajo un puente. El camino esta rodeado de restos altos muros que parecen indicar su importancia pasada así como algún tramo empedrado y zonas de roca con marcas de ruedas de carretas que quizás indiquen su importancia perdida. Sin más problemas llegamos a un parquecito con un abrevadero, fuente y lavadero a nuestra derecha. Cruzamos el río San Julián y llegamos a Ayerbe, punto de partida.
Alternativas
- En el Km. 12,1 giramos a la izquierda y descendemos a Riglos tomando como referencia la ruta en el km. 27,51.
- En el Km. 20,84 giramos a la izquierda y llegamos en descenso a la Estación de La Peña.
- En el Km. 27,51 seguir de frente por donde vinimos en la primera parte de la ruta para volver a Sarsamarcuello y/o Ayerbe evitando la parte más técnica del recorrido.
Cartografía
- Mapas del Instituto Geográfico Nacional a 1: 50.000 209 y 247 / 1:25.000 209 –III y IV, 247- I y II
- Mapas del Servicio Geográfico del Ejército 28-10 y 28-11.
- Carta nº 8 de Editorial Pirineo – El Reino de los Mallos
- Rutas CAI – nº 28 - Hoya de Huesca
|